La civilización maya, famosa por su conocimiento astronómico y su compleja cosmovisión, también dejó proverbios sobre el equilibrio, el respeto por la naturaleza y el ciclo de la vida. Sus textos, como el “Popol Vuh”, ofrecen enseñanzas sobre la creación, la comunidad y el respeto a los antepasados.
El maíz es la carne del hombre
El hombre y la tierra son uno, lo que a ella le duele, a él también
La raíz profunda no teme el viento
Quien respira con calma, escucha su corazón
El camino no se abre solo, se construye con cada paso
El sol sale para todos, pero solo brilla para quien trabaja
Quien enseña a un niño, siembra en la tierra fértil
El niño es la semilla, el adulto el árbol
El río no se llena en un día, así tampoco el corazón